Recorriendo la costa del Índico de Mozambique me ha ofrecido innumerables atractivos como la isla de Mozambique, con sus calles empedradas y sus majestuosas iglesias de la época colonial, y la isla de Ibo, con sus viejas ruinas y su atmósfera anclada en el pasado.
Las sensaciones que he tenido pisando estos lugares tan vírgenes me ha hecho preguntarme si era un sueño o una realidad lo que estaba viviendo y tanto las Quirimbas como Bazaruto han sido uno de esos lugares, con deslumbrantes playas de arena blanca, aguas cristalinas, un excelente clima templado durante todo el año y el refugio perfecto para unas vacaciones que ofrecen una mezcla perfecta de relajación y aventura.
Descubrir la costa de Mozambique ha sido el mejor regalo que me podía hacer como viajero.